Luis Pie y mis sospechas de que es más haitiano que Dessalines

En verdad yo creo que Luis Pie es más haitiano que Jean-Jacques Dessalines. Pero lo que yo crea no es lo realmente importante aquí, sino que se aclaren las razonables dudas que muchos dominicanos tienen sobre esto, aunque pocos se atrevan a expresarlas por temor a que lo llamen racista. A mí, me llamen lo que quieran, yo sólo defiendo nuestra dominicanidad y no me siento cómodo con que haitianos estén representando mi país en escenarios internacionales. Esto sería lo último que nos faltaba.

En estos días muchos dominicanos están celebrando la medalla ganada en las Olimpíadas de Rio de Janeiro, Brasil, por el extraordinario atleta olímpico, Luis Pie (nacido en Bayaguana, Monte Plata, 4 de marzo de 1994), en taekwondo, deporte en el cual compite.

Este joven alcanzó popularidad en el año 2014, cuando representando a la República Dominicana ganó medalla de oro en los XXII Juegos Centroamericanos y del Caribe, celebrados en Veracruz, México. Como consecuencia de su único apellido, Pie, desde ese momento saltaron dudas sobre su nacionalidad. Más de uno sospecho que era haitiano; más de dos se apresuraron a defender su dominicanidad.

Vamos a ver ciertos detalles sobre esto. Era el 2014 cuando el señor Pie tuvo sus 15 días de fama y hacia presencia en muchos medios de comunicación y le preguntaban sobre las nacionalidades de sus progenitores. Él siempre ha argumentado que su padre es haitiano y su madre dominicana. Llevaba sólo el apellido de ésta porque el padre nunca le reconoció. Sin embargo, cuando vemos las entrevistas que Marisol, madre del atleta, concede a medios de prensa podemos escuchar su innegablemente acento haitiano, y si leemos sus apellidos, Pie Desquile, tenemos razones para creer que ella es haitiana, poniendo en dudas las afirmaciones que el joven Pie ha hecho sobre la dominicanidad de su progenitora.

Si el padre es haitiano y sospechamos que su madre es también haitiana, entonces podemos colegir que por simple legislación de la República Dominicana él no es dominicano; y por simple legislación haitiana él sí es haitiano. Recordemos que la constitución haitiana reconoce como haitianos a todos los descendientes de sus nacionales nacidos en cualquier parte del mundo. Y también recordemos que el honorable Tribunal Constitucional de la República Dominicana (TC) estableció que los hijos de extranjeros en tránsito en el país no son dominicanos. La excepción a esta regla es que uno de los progenitores sea un residente legal en el país al momento del nacimiento. No obviemos que encontrar ciudadanos haitianos debidamente documentados en el país es muy difícil, no digo imposible, pero es escaso y más aún en 1994, año de nacimiento de este valeroso atleta olímpico. Esto merece, pues, una investigación.

En virtud de las dudas que han surgido en medios de prensa formales y redes sociales, extrañamente la Junta Central Electoral (JCE) emitió un comunicado este vieres 19 de agosto aclarando que sobre el tema de la nacionalidad del joven Pie no debe haber ninguna duda, “debido a que su acta de nacimiento y sus documentos se conservan correctamente en nuestros archivos”, dice literalmente la nota periodística. Continua que “al momento de Luisito Pie nacer en el año 1994, su madre Marisol Pie Desquile se encontraba asentada regularmente en sus libros registros, ya que nació en la República Dominicana en el año 1977, según reposa en los archivos de la Junta Central Electoral”.

Pero, si estamos creyendo que esto aclara las incertidumbres, nos equivocamos, antes las incrementan.

En entrevistas concedidas en noviembre 2014 a varios canales de televisión local, el señor Euclides Reyes, actual esposo de Marisol y por tanto padrastro del joven Pie, denunció que el atleta había tenido dificultades para obtener su pasaporte porque la JCE no quería emitirle acta de nacimiento. Observó, además, que varias federaciones deportivas ayudaron a salvar estas dificultades. Si la documentación de la madre, así como la del hijo, han estado tan debidamente conservadas en los libros de la JCE desde el 1977, año de nacimiento de la madre, ¿por qué el joven Pie tuvo dificultades para obtener los documentos que lo acreditan como dominicano? ¿Por qué la JCE tuvo dudas en el 2014 si esos documentos estaban tan “en orden”? ¿Cuáles fueron los motivos en el 2014 por los cuales la JCE se negaba inicialmente a entregar documentaciones de rigor que ya no existen en este agosto del 2016?

Lo repito una vez más, las dudas sobre la nacionalidad del atleta Luis Pie son razonables.

El señor Pie habla un perfecto español, no tiene acento extranjero alguno, es posible que toda su vida haya vivido en República Dominicana. Él dice que es dominicano y que está orgulloso de ello. Pero resulta que la ciudadanía es un derecho político y en derechos políticos no es lo que usted siente o desee, es lo que la una legislación imperante sobre el tema le otorgue.

Cuantos dominicanos que han vivido por décadas en Estados Unidos y tienen el deseo de ser norteamericanos, y muchos de ellos realmente se creen como tales, pero en verdad no lo son, por la simple razón de qué en ese país, como en todos lados, hay un un proceso legal que agotar para que los inmigrantes puedan convertirse en ciudadanos de ese gran país. Nadie se alarma por esto, todo el mundo acepta las reglas esté o no de acuerdo con ellas.

Por otra parte, en todos mis años de vida no he conocido hasta este momento a dominicano alguno de apellido Pie. Igualmente he preguntado a amigos y conocidos si conocen algún compatriota Pie, y tampoco. Y le hago la misma pregunta a usted, que está leyendo esto, ¿conoce usted algún dominicano apellido Pie? ¿Tiene usted algún familiar cercano o lejano, un primo tercero, cuarto o quinto, que sea Pie? Difícil, ¿no?

En verdad yo creo que Luis Pie es más haitiano que Jean-Jacques Dessalines. Pero lo que yo crea no es lo realmente importante aquí, sino que se aclaren las razonables dudas que muchos dominicanos tienen sobre esto, aunque pocos se atrevan a expresarlas por temor a que lo llamen racista. A mí, me llamen lo que quieran, yo sólo defiendo nuestra dominicanidad y no me siento cómodo con que haitianos estén representando mi país en escenarios internacionales. Esto sería lo último que nos faltaba.

Como dominicano prefiero que mi país no tenga ninguna medalla olímpica a no ser las que nos corresponda en buena lid, y es que no podemos pretender robar las glorias deportivas del hermano pueblo haitiano. Es posible que esas medallas sean de ellos y no nuestras. Es por esto que algunos medios de prensa haitianos, y no pocos internautas de allí, han estado reclamando para su país los merecidos honores del joven Luis Pie. Precisamente, este fin de semana en San Pedro de Macorís ciudadanos haitianos residentes allí hicieron una pequeña manifestación reclamando como haitiano a Luis Pie. Sus motivos ellos tendrán, y los dominicanos debemos respetar este reclamo.

Las dudas deben ser aclaradas.